Texto por María Montero Es cierto: en la Península de Nicoya, todos los caminos conducen a un viejo. Pero es falso que vivir 100 años sea, sin excepciones, algo encantador. Encantador para las estadísticas, eso seguro. El misterio de la longevidad en la región aumenta conforme se disipa la cursilería humanitaria, porque no hay peor combinación […]